Mezcla de ingredientes de origen animal y vegetal deshidratados, que, junto con aromas y especias, conforman una mezcla de naturaleza pulverulenta, la cual requiere de una hidratación, para obtener como resultado un producto líquido o semilíquido.
Características:
· Textura: Cremosa una vez hidratada.
· Sabor y aroma: Suave no tan fuerte como el queso.
Modo de preparación:
· Preparación en frío: Disolver la cantidad de producto en agua fría, con un batidor manual o una batidora eléctrica.
· Preparación en caliente: Calentar la cantidad de agua deseada sin que llegue a hervir, añadiendo la cantidad de producto adecuada. Remueva constantemente con un batidor de varillas o con una batidora eléctrica y hasta que se consiga el espesor deseado; retírela del fuego.
Se recomienda el uso de 87 g de producto por cada 500 ml de agua.
Consumo:
· Es el complemento perfecto para acompañar carnes y pescados.
· Ideal también como aderezo de pastas y ensaladas.
Historia de la marca:
Gallina Blanca nació en 1937 Barcelona elaborando cubitos de caldo concentrado. Tras su éxito con este tipo de producto, la compañía decidió ampliar su gama de productos con: caldos, sopas, platos preparados, pasta, refrescos y postres.
